Cuando me planteé escribir este post, en un principio quise hacerlo desde una visión general, pero creo que es mejor escribir desde mi prisma personal y a partir de ahí explicarme.
Yo considero que un juego de spanking, nunca tiene como objetivo la obediencia, es más creo que si ese fuera el objetivo habría un momento que no habría posibilidad de jugar. La confusión puede venir por dos motivos. En primer lugar que sumisión y rendición son dos actos que en su expresión mental y corporal se pueden parecer mucho y en segundo lugar que quizás la práctica más común en un juego de dominación/sumisión del tipo BDSM puro sea el spanking precisamente.
Como spanker necesito, de juego previo, en cierto modo de provocación y desafío que en parte es lo que me empuja a ejercer. Cosa muy distinta es cómo se produzca ese desafío, creo que un comportamiento constante tipo ''brat'' también me cansaría, pero ahí entra la variedad del juego. La rebeldía se puede mostrar de muchas maneras; una mala contestación en un momento determinado por ejemplo, que inicie un tira y afloja que culmine, o simplemente el incumplimiento deliberado de una norma pactada. Son dos formas muy diferentes de llegar a lo mismo ¿Qué determina el nivel de ese desafío?
Aquí es donde entra en la ecuación la palabra rendición. Yo considero la rendición el objetivo final de un juego, para mí la rendición es el momento en el cual la spankee se deja ir del todo, rompe consigo misma y sus resistencias, y se entrega a las sensaciones. Saber llevarla ahí es lo que determina para mi la habilidad de un spanker. Yo no he conocido a ninguna spankee que disfrute del dolor, lo que disfruta es la sensación y el contexto en el cual se produce y aquí lo mental tiene mucha fuerza.
La firmeza y determinación es clave para llegar a eso, es como un juego de acorralamiento de la spankee, que deje muy claro que ya puede quejarse, patalear, poner morritos... haga lo que haga la decisión está tomada y que lo mejor que puede hacer es rendirse, por el bien de su culo. Luego además tiene que saber que tú como spanker vas a tomar nota de su comportamiento y que eso va a tener una consecuencia añadida. Aún así en muchas ocasiones te van a retar, pero a mí personalmente ese reto me puede parecer divertido, incluso a veces llegándote a obligar a hacer uso de la fuerza (algo que a muchas les resulta muy excitante). Pero como decía antes, yo creo que la variedad es algo que debe estar presente en un juego, si los juegos empiezan a ser calcos del anterior algo se pierde. También entra mucho en juego la conciencia de culpa, es mucho más fácil conseguir una rendición cuando ella tiene claro que ha cometido una ''falta'' sin excusa posible que cuando es un juego surgido sobre la marcha que da más pie a la resistencia.
Para gustos los colores dicen y entiendo que hay gente que prefiera un juego de desafío constante a la autoridad y quien prefiera una juego de disciplina más pura y aceptación de consecuencias. Para mi personalmente lo ideal es como siempre término medio dependiendo de las circunstancias y el contexto.
Para terminar, me reitero en esa idea para mí básica de diferencia entre sumisión y rendición. Yo creo que el spanking persigue la rendición desde una base activa de la spankee, la spankee es parte activa del juego, no pasiva. Por lo tanto no sumisa y que aunque por momentos pueda parecerlo y mucho, realmente es una rendición. ¿Y las spankees cómo lo véis?
Coincido en este caso con Mariposas de Chocolate el verlo más cómo rendición; la sumisión la entiendo más en el gusto de obedecer de primeras y de complacer y servir, así lo viven y así lo sienten las personas sumisas. En cambio en mi caso como spankee necesito retar y por supuesto no acatar así de primeras, llegado el momento sí, me someteré al castigo pero no sin antes haberme resistido. Unas veces me rebelo más y otras menos, aunque eso sí, algo siempre voy a protestar.