viernes, 26 de julio de 2019

Vacaciones (Relato)


Autora: Cloe 


Llevábamos un tiempo planificando pasar unos días juntos, la distancia podía ser un impedimento para no vernos tanto como quisiéramos, aunque las ganas y el interés de ambos hacía que los kilómetros no fueran un problema para nuestra relación. 

Estábamos los dos de acuerdo en que queríamos playa, sol, arena, paseos y relax. Pasar unos días juntos cargado de confidencias, charlas y juegos podía seguir afianzando el vínculo que habíamos creado…

Alojarnos en un apartahotel a pie de playa, con vistas al mar, poco turismo y alejados del ruido era lo mejor que podíamos haber hecho, acertamos de pleno. Y nada más llegar, chapuzón.

Tiramos las toallas, puso la sombrilla, él se quitó la camiseta y se quedó con el bañador, y yo me quité mi pantaloncito playero y la parte de arriba del bikini. Casi medio arrastras le tuve que llevar al agua porque el niño no tenía ganas de bañarse…

-         Venga vaaaaa vamos al agua¡¡¡
-         Yo me espero un poco, no me apetece ahora
-         No! quiero contigo! vamosssss
-         Ve tú, yo te miro desde aquí
-    Quieres que me tire encima de ti, te coma los morros y monte un   numerito?
-         Me estás amenazando?
-         Yooooo? Nooo para nada, es sólo una advertencia, lugar público recuerda  quien manda en estos momentos, no digo más… además no tengo ningún reparo en  tirarme encima de ti, ya me conoces…

Después de mantener por unos instantes nuestras miradas fijas y penetrantes, se levantó, me dio un azote y me dijo: tira anda¡¡¡

Después del chapuzón, tan rico y sin parar de jugar, reír y hacernos carantoñas en el agua, nos salimos, nos secamos y nos fuimos a comer al chiringuito.

Cuando estaba tomándose el café, y yo un helado…

-    Ahora habrá que esperar una hora para volver a bañarse, para evitar el corte de digestión…
-     Jajajaaaaa eso es de abuelos… y el corte de digestión no existe¡¡ es un bulo jajajaaa. Pues yo me pienso bañar ahora mismo, tú haz lo quieras.
-       No, no te vas a bañar hasta que yo te lo diga, te queda claro?

No pude evitar sentir un revoloteo de mariposas en mi tripa.... Aunque preferí no contestar y seguir comiendo mi helado.

Al volver a las toallas, nos tumbamos y a los 5' no aguantaba el calor, aunque estábamos con la sombrilla…
Le dije: me voy a ir al agua, con voz bajita como medio pidiendo permiso y advirtiendo que me iba a ir sí o sí, pero quería que lo supiera.
Su mirada lo decía todo… pero preferí no hacerle caso, necesitaba ese baño.
Así que me levanté como el que no quiere la cosa, él no apartaba la mirada, yo preferí no mirarle mucho… y me fui al agua. Dentro del mar se estaba en la gloria, agua fresquita, soportable y en calma… Diossss que gusto¡¡¡

Al salir me fui a tumbar en la toalla, y me dijo: En cuanto te seques subimos un momento al apartahotel.
De repente me cortó todo el rollo aunque preferí no decir nada.
Cuando se me empezaban a cerrar los ojos…

-         Nena¡ vamos¡

Medio protesté, pero me levanté, me puse la parte de arriba del bikini, me cogió de la mano y nos fuimos directamente.

Al entrar, él acopló la silla en medio de la habitación y me puso enfrente de él.

-         Sabes porqué estamos aquí verdad?
-         mmmmm  no sé…
-        Sí, si lo sabes, tu y yo tenemos unos acuerdos. Con lo que hemos comido está claro que no te iba a dar un corte de digestión. Te voy a poner el culo como un tomate por desobediente y caprichosa.

Seguidamente me bajó las braguitas del bikini y me colocó en sus rodillas, yo refunfuñe un poco pero preferí no resistirme.

Una vez que estaba boca abajo, mirando el suelo, con mis pies colgando y mi culo expuesto. Me dijo sí tenía algo que decir al respecto. Y sólo me salió con voz aniñada… que no era para tanto…
Y que estábamos en la playa…. Joooooo…..

Antes de darme el primer azote, me acarició el culo y me dijo que estaba fresquito… a ver como lo tienes dentro de 10 minutos.

- La próxima vez te lo pensarás dos veces

Y sin más empezó darme con la mano azotes con firmeza y algo intensos.

Plas plas plas plas plas plas plas

Cuando me empezó a picar el culo, empecé a retorcerme un poco y paró unos minutos, me acarició y seguidamente volvió a zurrarme...

El frescor que me había dejado el agua del mar se me quitó en un momentito porque sentía todo mi cuerpo arder, Diosss que calorrrr y que picor¡¡¡

Cuando lo consideró oportuno y después de haberme dejado el culo bien calentito, me ayudó a levantarme, me subió el bikini y me dijo: A ver lo que te dura¡
Me puse roja de la vergüenza, eso y que mi bikini era más pequeño que mi culo y se me salía la rojez por los lados... 

Me volvió a dar la mano y me dijo: Luego seguimos la conversación... 
Ahora vamos a darnos un baño que hace calor¡¡ 

1 comentario:

  1. Si se tienen acuerdos están para cumplirlos y cuando no se cumplen pasan cosas como esta.

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